Fe a cuentagotas en el bautismo

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INTRODUCCIÓN

En este artículo sobre los neófitos se nos presenta una nueva realidad que está viviendo la iglesia española. Poco a poco, está aumentando el número de adultos que se bautizan para abrazar la fe cristiana, mientras otros se están alejando de ella. Solamente uno de cada tres niños en el país están recibiendo las aguas bautismales, porque la sociedad está viviendo un proceso de secularización. La realidad del catecumenado empezó en el siglo II y III d.C. cuando los apóstoles se dirigieron a los adultos para el bautizo, pero fue después de la paz de Constantino (313) cuando los nuevos bautizados fueron los niños.

ANÁLISIS DEL SACRAMENTO

Como bien señala el obispo de Huesca y Jaca, monseñor Julián Ruiz, miembro de la subcomisión de catequesis de la Conferencia Episcopal Española (CEE), en nuestro país “se bautizan unos 3.000 adultos al año.” Mientras unos abrazan la fe cristiana ya de adultos, otros se alejan de ella. Las cifras de fieles caen año a año, si se tiene en cuenta que muchos padres deciden no cumplir el primer sacramento, que es el bautismo, con sus hijos.

Y es que los bautizos descienden en picado, como se desprende en el Informe Anual de Actividades de la CEE, que indica que este sacramento sufre una fuerte caída, atendiendo a los últimos datos que ofrece el organismo, con 226.125 bautizados frente a los 349.820 que lo hicieron en 2010. Con la crisis económica, este rito padeció un declive espectacular, de casi el 29%. Es verdad que los nacimientos también disminuyeron entre 2008 y 2014, según el INE, pero lo hicieron en un porcentaje muy inferior: el 18%, once puntos menos que los bautizos. Con estos datos, se puede decir que hoy uno de cada tres niños recibe las aguas bautismales.

Figura 1. Pila bautismal de arcilla vidriada en el Museo de Málaga.

La causa de esta pérdida de número de bautizados está principalmente en la secularización de la sociedad. Y es que todo parece indicar que se está prescindiendo de Dios, las personas creen que no lo necesitan y como consecuencia de ello dejan de bautizar a sus hijos. Una realidad, que definen perfectamente los teólogos subrayando: ¿Cuántas personas entre 20 y 50 años van a misa? Pocas… y si un padre o una madre no acuden a la Iglesia, no rezan ni hablan con Dios, difícilmente su hijo recibirá una educación cristiana.

La población española entre 18 y 24 años no se identifica con ninguna fe, una cifra que contrasta con el 90% de mayores de 65 años que sí lo hace, según los datos del informe Laicidad en cifras 2018 de la Fundación Ferrer. España es uno de los países que más rápido se está secularizando. El proceso de descristianización del país es frenético porque en apenas veinte años se ha reducido notablemente el número de bautizos, bodas católicas, confirmaciones y asistentes a misa, según datos recogidos en el libro Cómo nuestro mundo ha dejado de ser cristiano. Anatomía de un derrumbe de GuillaumeCuchet, profesor deHistoria en la Universidad deParís-Est-Creteil.Ensayo, que confirma losdatos del CIS que señalaronque en el 2017 un 66,9% seconsidera católico, 10,4 puntosmenos que en el año anterior2016.

Así, como apuntan los expertos, este proceso de descristianización proseguirá en los próximos diez o quince años porque los adolescentes no son educados en la fe. España pasará, por tanto, de una religión sociológica a una de convencimiento personal. De ahí que la Iglesia se haya puesto manos a la obra para dar respuesta a los que se acercan a ella con la inquietud de entrar a través del bautismo. Por eso, las diócesis españolas se han propuesto aumentar el número de neófitos a través de programas que se han implantado en sus iglesias, un proceso de catecumenado de niños de 7 a 14 años que se preparan a recibir el sacramento del bautismo, con la intención de que esté en todas las parroquias de las diócesis antes de 2025.

Hoy por hoy, muchos niños que están en los colegios ven como sus compañeros están bautizados, hacen la comunión y se confirman. De esas conversaciones de patio, muchos acaban acercándose o pidiendo a sus padres que quieren comulgar como sus amigos. Pero el interés por el bautismo no pasa solamente por los niños, sino que también está presente entre los mayores de edad con 3.000 personas al año.

Las cifras pueden parecer no desorbitantes, pero indican que en los próximos años aumentarán de forma significativa precisamente porque mucha gente va buscando cubrir el campo espiritual. Una realidad a la que dio respuesta la Iglesia en el año 1972, cuando se restauró el ritual de iniciación cristiana de adultos. Quienes están pensado en abrazar la fe católica a través del bautismo deben saber que no se trata de un proceso corto ni sencillo, porque un católico no se hace de un día para otro necesitándose una media que oscila entre un año y dos años para estar preparado para recibir las aguas.

  1. Causas y fases del bautismo de adultos

Las causas que llevan a los adultos a abrazar la fe cristiana son tres: en primer lugar, están las personas que se han encontrado con sufrimiento en la vida a causa de un accidente o la muerte de un hijo; en segundo lugar, los que se han echado un novio o una novia y quieren casarse por la Iglesia y, por último, los que hacen una conversión de manera libre. Asimismo, los que se bautizan en España giran entre los 20 años hasta los 45, prevaleciendo los no nativos y siendo en su gran mayoría rumanos. Aparte, no hay diferencia entre sexos, al acercarse los dos por igual.

Figura 2. Pintura mural sobre los neófitos de Masaccio.

El catecumenado tiene tres fases. Cuando uno es un simpatizante recibe el nombre de precatecumenado; luego, pasa a ser catecúmeno con un rito de admisión, catequesis, rito de elección y sacramentos en la Vigilia Pascual (bautismo, eucaristía y confirmación con el obispo) y, por último, neófitos, hasta el aniversario del bautismo, por tanto, un año. Así, la realidad del catecumenado empezó en el siglo II y III d.C. cuando los apóstoles se dirigen a los adultos para el bautizo, pero después de la paz de Constantino (313) los nuevos bautizados eran niños. Al final, resurge en la década de los cuarenta en los adultos en Francia por el problema de la secularización.

  1. Crecimiento en Europa

El bautismo entre los adultos crece en el mundo, mientras un estudio del centro Pew Research Center revela que el abandono de la religión en edad adulta sitúa a España como el tercer país europeo con mayor abandono del cristianismo después de Bélgica y Noruega. De eso se hace eco monseñor Julián Ruiz quien apunta que en Francia cada día “se bautizan más adultos que niños”, que muestra cuál va a ser el futuro de Europa. Ese crecimiento de tomar las aguas ya de adulto es una realidad en la diócesis de Inglaterra y Gales, mientras que en Australia es el doble que en Francia.

El pasado año, el país galo registró más de 4.000 bautizos de adultos durante la noche del Sábado Santo hasta el Domingo de Pascua, donde el 22% de los catecúmenos no tenía ninguna religión y el 7% era de origen musulmán. Por último, según los datos recogidos por el Servicio Nacional de Catequesis y Catecumenado de Francia, el perfil de los recién llegados a la Iglesia católica romana tenía entre 18 y 35 años, suponiendo el 55%, mientras que los mayores de 56 años suponían el 6%. Así, los trabajadores y empleados representaban más de un tercio de los nuevos conversos, seguido por un 16% de los estudiantes y el 14% que eran los docentes, los empleados de profesiones liberales y los directivos.

CONCLUSIÓN

Hay esperanza en la Iglesia española con el bautismo de adultos. Una nueva realidad que no solamente está viviendo España, que también se está produciendo en Francia, Bélgica o Noruega. Los recién llegados a través del bautismo son jóvenes, entre los 18 y 35 años, que proceden de países extranjeros o que bien lo hacen porque se van a casar o por una crisis personal.

RESUMEN

La Iglesia en Europa vive un proceso de secularización y eso se refleja en el bautismo donde en España solamente lo hace uno de cada tres niños. Un sacramento, que suma cada año gracias a la conversión de los neófitos a edad adulta, haciéndolo unos tres mil.

BIBLIOGRAFÍA

  • CUCHET, GUILLAUME. Cómo nuestro mundo ha dejado de ser cristiano. Anatomía de un derrumbe. París, Ediciones de Seuil, 2018.
  • ABAD IBÁÑEZ, JOSÉ ANTONIO. Catecumenado 2. Libro del catecúmeno. Madrid, PPC EDITORIAL, 2019.
  • DELGADO GÓMEZ, ALFREDO. Queremos seguir a Jesús. Proceso catecumenal para adultos. Madrid, PPC EDITORIAL, 2012.

IMÁGENES

  • Figura 1. Pila bautismal de arcilla vidriada en el Museo de Málaga. Imagen de Roberto Núñez Gutiérrez, autor del artículo.
  • Figura 2. Pintura mural sobre los neófitos de Masaccio. Dominio público en Wikipedia.

Roberto Núñez Gutiérrez

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