¿Cuál es el mejor método para la enseñanza de la lecto-escritura?

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En mis años de docencia he podido comprobar la preocupación de muchos compañeros y compañeras en la búsqueda del método más adecuado para la enseñanza y el aprendizaje de la lecto-escritura.

En torno a la lectoescritura existen múltiples métodos y teorías que los fundamentan. Unos se centran en los aspectos más formales del aprendizaje y tratan el proceso desde las partes hacia el todo, es decir, partiendo de las letras, hacia las sílabas, posteriormente las palabras y luego las frases. Otros métodos son constructivistas y atienden a teorías que insisten en que la percepción del niño comienza siendo sincrética, captando la totalidad y no adentrándose en los detalles, parten del todo y presentan al niño palabras completas con su correspondiente significado. Los educadores son conscientes de la necesidad de conocer los diferentes métodos y conocer sus alumnos para escoger las mejores estrategias de la enseñanza aprendizaje de la lectoescritura. Por ello, unos docentes defienden el método alfabético, otros se decantan por el método silábico, algunos por el mixto…. Pero la gran cuestión es , ¿cuál es el método más adecuado?, ¿existe un método mejor que otro?, ¿hay que enseñar con varios métodos a la vez?.

Por mi propia experiencia y por las variadas investigaciones que he leído (Ferreiro, Braslavsky, Palacios, Teberosky, etc.), considero que los niños (con un desarrollo normal) aprenden “a pesar” del método, es decir, no nos debe preocupar la metodología que utilicemos, sino el proceso de andamiaje previo o la llamada alfabetización inicial; por lo tanto, lo realmente importante es sentar las bases adecuadas para la lecto-escritura.

En este sentido es importante destacar la CONCIENCIA FONOLÓGICA, ya que es el elemento que permite predecir notablemente las futuras habilidades para leer y escribir, por lo que debería ser una de las metas más importantes en las actividades con niños en el nivel inicial. Niños con una sólida conciencia fonológica se mueven fácilmente en situaciones formales de aprendizaje de la lecto-escritura y a la inversa, aquellos que tienen un pobre desarrollo de la conciencia fonológica se encuentran en riesgo de desarrollar dificultades para leer.

En consecuencia, lo que los docentes podemos hacer para ayudar a los niños en el proceso lecto-escritor es ayudarles a “fragmentar el código” escrito y aprender las conexiones entre los grafemas y los fonemas.

(Imagen tomada de: http://arjonadelia.blogspot.com.es/2010/07/poemas-cortos-del-dia-del-maestro.html)

La conciencia fonológica es vital en el camino del aprendizaje de la lecto-escritura. Los pasos a seguir en este proceso es que los niños comprendan que:

  • Las oraciones se fragmentan en palabras. Por ejemplo: La – casa – de – Ana – es – pequeña. (6 palabras). Como sugerencia y motivación se puede pegar un gomet debajo de cada palabra.
  • Las palabras se pueden separar en sílabas. Por ejemplo: A- na (2 sílabas), pe-que-ña (3 sílabas).
  • Las sílabas se pueden separar en sonidos individuales llamados fonemas. Ejemplo: A-n-a (3 fonemas), c-a-s-a (4 fonemas).

Visto de una forma más gráfica:

Frase

La casa de Ana es pequeña.

Palabras

La

casa

de

Ana

es

pequeña.

Sílabas

La

ca-sa

de

A-na

es

pe-que-ña

Fonemas

L-a

c-a-s-a

d-e

A-n-a

e-s

p-e-q-u-e-ñ-a

 

  • Aprender que los grafemas (letras) representan sonidos (fonemas). Para ello se pueden utilizar los siguientes recursos:
  • Resaltar la forma de un grafema dentro de una palabra escrita. Por ejemplo, M
  • Nombrar la letra inicial. MARTA empieza por la letra “EME”.
  • Destacar el sonido. Por ejemplo, “Esta letra suela /M/”.
  • Enfatizar el sonido brinda mucha información auditiva a los niños. MMMMMARTA.
  • Se les puede proponer juegos como por ejemplo, Marta empieza por /M/, ¿conocéis más palabras que comiencen por esta letra?

Los recursos citados en este artículo son tan sólo algunos ejemplos de cómo trabajar la conciencia fonológica. Si os interesan otros ejemplos y actividades podéis consultar el siguiente enlace:

http://www.orientacionandujar.es/tag/conciencia-fonologica/.

Como conclusión, resaltar que una buena base es fundamental para enfrentarse a al proceso de lecto-escritura. Este período previo es crucial porque los niños deben aprender a leer y luego leer para aprender futuros contenidos.

Lorena Ramos Martín

CRA “Los Robles” Ledrada (Salamanca).

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