La inteligencia artificial en la docencia, ¿ángel o demonio?
La inteligencia artificial (en adelante IA) ha supuesto una revolución tecnológica en todos los sectores y también en el ámbito de la docencia, presentando tanto oportunidades como grandes desafíos. Por un lado, la IA puede ser considerada como un «ángel» para la educación por su capacidad para personalizar el aprendizaje, facilitar la enseñanza adaptativa y también mejorar la eficiencia en la gestión educativa.
Por otro lado, algunos expertos consideran que la IA podría ser un «demonio» para la educación si no se implementa de manera ética y responsable. Existe preocupación sobre la privacidad de los datos del alumnado, el sesgo algorítmico, la dependencia excesiva de la tecnología en detrimento de las habilidades humanas, el impacto en la autonomía y creatividad de los alumnos, así como en su evaluación.
Estos desafíos deberemos abordarlos con una adecuada regulación, formación continua de docentes y alumnado, fomentando el uso ético y transparente de la IA en el entorno educativo.