La empatía en Educación Infantil
Desde el nacimiento todos los seres humanos poseemos una capacidad de empatía, que está desarrollada en mayor o menor grado, y durante los primeros meses de vida, el niño comienza a descubrir las emociones de los demás, gracias al primer vínculo que establece con sus figuras de apego. Los padres y los maestros tienen una influencia determinante en el desarrollo de empatía del niño, ya que ésta evoluciona en función de la educación que recibe de la familia y de la escuela.
La empatía permite a los niños romper con el egocentrismo tan marcado en la infancia, y para que se produzca un buen desarrollo de la empatía se deben trabajar los siguientes aspectos: la sensibilidad, la capacidad de escucha, el pensamiento flexible, la tolerancia, las habilidades comunicativas, la bondad y el asertividad.